jueves, 19 de agosto de 2010

Los pobres portátiles

Afortunadamente, la informática es uno de los campos que ha evolucionado más a lo bestia en los últimos 20-25 años. Digo afortunadamente, porque gracias a ello, muchos podemos dedicarnos a esto 8-D.
Ahora en serio, la simplificación paulatina de los sistemas operativos y la reducción extrema de los costes de los ordenadores, permite que hoy en día sea rara la casa donde no haya, al menos, 2 ordenadores.

Como ejemplo claro de evolución, tenemos el caso de los portátiles.
En los tiempos en los que me compré mi primer ordenador (año 1999, al empezar la carrera), los de sobremesa eran razonablemente caros para la época, digamos que sobre 200.000 pesetas, unos 1200 euros. Pues los portátiles, podían doblar tranquilamente esa cantidad, eran un lujo al alcance de ejecutivos o de profesionales. Era obvio, ya que obtener las mismas, o incluso inferiores prestaciones con un tamaño varias veces inferior, requería piezas más precisas y específicas, y como ocurre con cualquier producto en el mercado, al venderse poco, no podían bajar los precios.

Con el paso de los años se vio que la gente no necesitaba un hiper-ordenador capaz de competir con Deep Blue, salvo aquellos que se dedican a jugar mucho o al sector audiovisual. La gente buscaba comodidad, portabilidad, no tener que usar cables. Para eso, los portátiles eran ideales. Qué mejor que poder ver el correo en el sofá, o entrar en el twitter tumbado en la cama ... La compra masiva de portátiles hizo que su precio se desplomara, y hoy en día, no hay grandes diferencias de precio. Por 350 euros se puede comprar un portátil respetable. Por 500, un "pepino". Ahora bien, esta caída de precios hace que la gente se tome a su ordenador como un cacharro más, como una playstation (que es un ordenador camuflado), como una báscula o como cualquier cosa.

¿A qué viene todo esto? Pues me gustaría dar unos consejillos para aquellos que tienen portátiles, u ordenadores, en general.

- No usar continuamente la batería si se está siempre en el mismo sitio. Para eso está el cargador/adaptador de corriente.
- No dejar puesta la batería mucho rato una vez que está cargada. No pasa nada grave, pero es mejor quitarla.
- No apurar la batería hasta que se agota. Podemos perder datos o dejar a medias alguna tarea.
- APAGAR el ordenador cuando no se vaya a usar mucho rato. Bajar la tapa no es apagarlo.
- No apagarlo de un botonazo si no es necesario. El ordenador no es una televisión.
- Extraer con seguridad las memorias USB. No sacarlas sin más.
- Tener al menos 2 particiones en el disco duro. 1 para programas, 1 para datos. Luego pasa lo que pasa cuando entra un virus.
- Tener un antivirus. El Avast es gratuito y bastante bueno, por ejemplo.
- Hacer copias de seguridad. Fotos, pelis, música, datos importantes. Cada cierto tiempo, o a un disco duro externo, o a DVDs. Un DVD vale 20 céntimos.
- RECOMENDABLE: venden unas bases para ordenador, con pequeños ventiladores debajo. Aunque los portátiles se calientan cada vez menos (el mío es Centrino 2 duo y se calienta poco), obviamente, la disipación de calor en estos equipos es difícil. El calor es el peor enemigo de un ordenador, a largo plazo. Estas bases, que valen sobre los 20 euros, "refrescan" al ordenador, al procesador y al disco duro, y permitirán alargar la vida del equipo.

La última, refrescad el ordenador mediante aire, no como hizo Bono hace poco, que cuando vio salir humo del ordenador, echó un vaso de agua, como ya conté en un post antiguo. Tampoco vale que le pongáis hielos debajo. Pobrecitos cacharrines...

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